Llegan a veces cartas
que nos roban el alma
que nos dejan el cielo
sembrado de esperanza
Que nos pintan las nubes
del color de la calma
que nos cuentan un cuento
de ilusión y de magia.
Que nos ponen un beso
en los labios del alma
que nos dejan serenos
de futuro y nostalgia.
Que nos dejan sinceros
perfumados de albahaca
de romero y de menta
como sueños del agua.
Son cartas alumbradas
con el sol de mañana
con los rayos tan tiernos
de los dedos del alba.
Palabra para siempre
para siempre mirada
que nos siembra una estrella
en los prados del alma
en los prados del alma